Los recolectores de miel de muchas tribus siguen la ruta que les indican las flores hasta los mejores colmenas. Pero su vida no es un camino de rosas.

El ritual de la cosecha varía ligeramente de una comunidad a otra, se inicia con una oración seguido de unas plegarias dada la peligrosidad de la acción . Seguidamente, en la base del acantilado, se enciende un fuego que hará huir a las abejas. Los recolectores de miel suben y bajan por una precaria escalera de cuerdas con la protección de una simple tela y las oraciones a sus dioses .

Se utilizan diferentes técnicas para conseguir nuevas texturas, como el tricot manual mezclando materias, la técnica del tapiz y la del tejido de la cesta. La investigación de tejidos es una pieza clave en esta colección, que se inspira en la construcción de las colmenas de abejas. Los colores recuerdan a la miel. Los tonos tierra y el blanco se convierten colores simbólicos .

El gusto, el olfato y el tacto están presentes en toda la colección para transportarnos al mundo de las sensaciones.