El mar o la mar. El riesgo y la atracción repartida entre dos géneros: el masculino y el femenino. Ambos imprescindibles, ambos complementarios.

La relación de las mujeres con el mar se muestra intensa y cambiante en el transcurso de la historia. Como acompañantes, vestidas con prendas masculinas o incluso como piratas, las mujeres han navegado los mares. En el ámbito de la economía marítima las mujeres han aportado a lo largo de los siglos su esfuerzo y capacidad organizativa. Su trabajo ha cubierto importantes áreas de carácter social en las comunidades pesqueras y marineras.

Aunque la relevancia de la participación femenina resulta incuestionable, hay un déficit en el reconocimiento público de su aportación. Esta colección está inspirada en todas estas mujeres y su fuerza.

Las formas orgánicas, repetitivas y redondeadas dan paso a piezas oversize para conseguir movimiento. El patronaje parte de prendas de trabajo. Se busca la sinuosidad a través de las piezas más voluminosas de denim.

Las materias como la cinta y el cordón representan las redes y las cuerdas de las barcas. Se trabaja la técnica del macramé y el bajo liso con telar manual.

Los tejidos más suaves se trabajan con cordón elástico para conseguir movimiento.

Los puntos deshilachados y abiertos simbolizan la red. Se tejen manualmente mediante la técnica de la media y el ganchillo.

Los materiales más utilizados son el algodón, el lino y la seda. La rafia se teje creando gorros y complementos.

El color plateado es representativo en esta colección que combina blanco y negro, azul marino, turquesa y gris claro. Para conseguir el efecto degradado de grises se utiliza la técnica de la tintura artesanal en pieza acabada.